Con la sonrisa puesta, observando paisajes utópicos... sobrevolando las alturas con la mirada, recorriendo largos caminos que susurran que estás ahí, que tengo que seguir caminando para encontrarme contigo... viendo a lo lejos cómo algo brilla, algo que me dice que me quieres, algo que me ahorra el desfallecer, que me da las fuerzas que necesito... lanzando besos a la luna, y abrazando a un tú imaginario, un tú que deseo tener entre mis brazos a todas horas... un tú inagotable, feliz y deseante como yo... A la orilla del mar, donde los sueños se cumplen, donde el aire roza con tu cara haciendote cosquillas u diciéndote que todo va a ir bien... allí donde sólo tú y yo tenermos cabida tantas noches... a la orilla del mar...
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