miércoles, 16 de julio de 2008

Tierra mojada...

Intensa jornada la de hoy… me llega desde la ventana entreabierta el olor a tierra mojada… me encanta la lluvia, no lo puedo evitar, hace que me quede embobada por momentos, mirando, expectante, como si se me fuera a conceder un deseo… con relámpagos que se descubren ante mis ojos, centelleantes…



“La vida consiste en dar patadas a ese balón imaginario… corriendo como si fuera ése el último partido, del que depende tu satisfacción, sin atender a jugadas anteriores… como una búsqueda de emociones, de sensaciones, sean las que sean… nunca es incompleta si se cuenta con buenas intenciones” hoy toca jugar un poco, y tal vez ser “mala” ;)

(Emulando a Fotolog… aquí os dejo una canción: Sharam ft. Daniel Bedingfield - The one)

sábado, 12 de julio de 2008

Allá por el horizonte...

Allá por el horizonte, donde no se atreve a molestarnos nadie, en la colina o desde la orilla, mirando de lejos, viendo cómo atardece, donde se disipan nuestras dudas, los problemas… allá en donde nos asomamos cada vez que sentimos ese vértigo, para saltar y así aplastarlos, intentando hacer presión con los buenos momentos que tensan la cuerda de la felicidad…
Con risas recordadas, con caricias alocadas… buscando caminos, razones, poniendo arcoiris a un cielo desgastado…

viernes, 11 de julio de 2008

Permanente...


Avanzas en silencio, por un camino delicado e incoherente, cuando de repente te topas con la ignorancia en persona, si señor! De la mano de la ingenuidad que te hace creer que aquello que piensas es posible, rodeada de estúpidas nubes que te dificultan la tarea de ver la realidad que acontece… nubes de ilusión, de placer; una sola idea frustra tus planes de huida a un mundo imaginario que te apartaría de tus males, pero que te llevaría a otro aún más ilusorio y difícil de dibujar… un extenso parque plagado de extensiones donde el bien era común y la suerte estaba echada… un lugar donde los duendes brincaban haciendo graciosas piruetas y te hacían cosquillas en el vientre y en los pies… una parte del universo donde el dolor era anestesiado por la satisfacción infinitesimal de tocar el cielo con la punta de los dedos… un paraje lleno de maravillas, de gratuitas sonrisas de nata y caramelo con las que gustaba el reír, besar… repleto de favores devueltos y de promesas ya cumplidas… delicados roces que te erizan la piel hasta hacer que sepa a vainilla y exótica canela que maquilla el erotismo del ambiente… un paraíso completo con la aportación de cada ser humano que lo allanaba con su pisada, que lo absorbía, que lo mimaba…



Un toque en el hombro te devuelve al asiento en el que estás, sin poder hacer ya nada, sin poder evitar que tu pequeño universo de colores se desvanezca hasta… hasta que tus ojos se posan en quien te ha tocado, quien lo hace permanente…